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Ramón Muñoz Casares

-Manuel Perales Solís-

 

Escuché hablar del maestro Ramón Muñoz Casares  a los más veteranos afiliados socialistas que frecuentaban, casi a diario, la Casa del Pueblo durante la ya lejana década de los ochenta del pasado siglo.  Destacaban de él sobre todo su brillante oratoria y su natural facilidad para explicar de manera clarividente la misión que deberían de asumir los obreros del campo dentro  del régimen republicano nacido el 14 de abril de 1936. Guardo aún en la memoria, la devoción con la que estos últimos testigos de aquella incipiente República, tan prolífica en proyectos y avances legales necesarios para el país, hablaban de esos líderes que, como Ramón Muñoz, mantuvieron  un compromiso leal con los jornaleros del campo  en momentos históricos de especial complejidad pero, al mismo tiempo, de enorme esperanza  para superar la secular desigualdad que los mantenían en el atraso social y cultural más inmoral y desmedido de las regiones de Europa.  

 

Aunque  Ramón Muñoz Casares tuvo una estancia  muy breve en Marmolejo, sin embargo, podemos decir que  no pasó desapercibida pues antes de su llegada a la villa ya era conocido entre los jornaleros afiliados al Centro Instructivo Obrero, por haber participado en actos públicos y conferencias del Partido Socialista y de la UGT en la sede de la Casa del Pueblo de la calle Jesús.

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  Nacido en el municipio granadino de Cozvíjar, el 24 de noviembre de 1903, cursó sus estudios de magisterio entre 1926 y 1927, en la Escuela Normal Superior de Maestros de Granada. En su dilatada vida profesional, consta que se encontraba hacia 1932 en el municipio granadino de Fornes, del partido judicial de Alhama de Granada; luego su rastro nos lleva a Villardompardo (Jaén) donde se afiliaba a las Juventudes Socialistas ganándose el afecto de los compañeros socialistas de esa localidad. Cuando en julio de 1933 lo destinaron a la Escuela Unitaria n.º 2 de Guadahortuna (Granada), las Juventudes Socialistas de Villardompardo elevaron por escrito la siguiente  petición al Ministro de Instrucción Pública, Francisco Barnés, en el que le reclamaban la anulación de dicho destino: 

    “Muy Sr. nuestro y elevado ciudadano: Los abajo firmantes, Presidente y Secretario de la Juventud Socialista de este pueblo, y en representación de la misma, ante S.E., exponen lo siguiente: Haciéndonos eco del sentir popular solicitamos de ese Ministerio la permanencia en este pueblo del Maestro Nacional D. Ramón Muñoz Casares y por lo tanto la anulación de su nombramiento para Guadahortuna. Este noble y republicano maestro, honra de su clase, se vio precisado a solicitar 200 plazas desesperadamente en el pasado concurso, por consecuencia de los atropellos, coacciones y amenazas de atentar contra su vida, que los elementos caciquiles le hicieron al verle propagar con su palabra y con el ejemplo entre los campesinos, las ideas republicanas. Su radio de acción en conferencias culturales, se extiende a casi toda la provincia, la mayoría de los pueblos le quieren y lo solicitan; los niños le aman con verdadero delirio; y en estas circunstancias nosotros creemos, que por ningún motivo pueda haber razón a quitarnos a nuestro Maestro. Por lo cual esperamos de S.E. anule dicho nombramiento, por ser deseo de un pueblo entero, y quizás de una provincia. Viva S.E. muchos años para bien de la República. Villardompardo a 19 de julio de 1933”. Firmaban esta carta el presidente de las Juventudes Francisco Melero Rodríguez y el secretario, Francisco Amor Moya (1). 

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Solicitud de las Juventudes Socialistas de Villardompardo al Ministro Barnés. Fuente: Archivo General de la Memoria Histórica-Salamanca.

  Parece que aquella solicitud surtió efecto y pudo renunciar finalmente al destino. En el concurso del siguiente año, le adjudicaban plaza en Villaviciosa de Córdoba y en el siguiente curso escolar era destinado a Marmolejo donde  se implicaba, en cuerpo y alma, en las actividades del Centro Instructivo Obrero.  

  A comienzos de 1935  y tras los acontecimientos vividos  en nuestra localidad durante la Huelga Revolucionaria del 6 de octubre de 1934, en la que participó activamente, sufriendo prisión durante dos meses en Jaén, solicitaba permuta de destino a La Granjuela (Córdoba)  con el  maestro de primaria  Nicolás Muñoz Ruiz. Curiosamente la maestra Adela Albendín Ortega, a la que hacíamos mención en anterior artículo, aparecía en agosto de 1934 con plaza para el siguiente curso,  en el municipio de Peñarroya-Pueblonuevo a escasos kilómetros de La Granjuela. 

  Evidentemente pudieron ser determinantes en ambos traslados, con cierto tufillo a “destierro obligado”,  las presiones ejercidas desde los poderes locales del partido Radical, pues era obvio que tanto “don Ramón” como “doña Adela” profesaban abiertamente, y sin tapujos, su ideología de izquierdas y su compromiso profesional con el proyecto educativo de la 2º República. No olvidemos que algunos de los máximos dirigentes del socialismo local, como Andrés Rodríguez Gómez (primer alcalde socialista de la República) y Antonio García “Maqueano” (concejal socialista y varias veces Teniente de Alcalde) optaron por el exilio a Gibraltar para  eludir la feroz represión desatada desde el gobierno central contra los huelguistas participantes en aquella jornada revolucionaria. En el caso que nos ocupa no cabe duda que su condición de funcionarios públicos  vino a actuar de “relativo blindaje” frente a los deseos de revancha de los sectores más conservadores, en esos momentos, en el gobierno de la nación, tal y como también ocurriera con el jefe de la estafeta de correos, José Torres Buenaño al que obligaron a pedir destino en Mondragón. 

    Resulta pues evidente  el  compromiso de Ramón durante su estancia en Marmolejo, con los ámbitos obreros de la localidad. Unos meses antes  a la Huelga General aparece tomando la palabra en los mitines del Centro Instructivo Obrero: el 14 de marzo en el acto de propaganda socialista y antifascista organizado por las Juventudes Socialistas en el que intervino junto a otros oradores locales, tal y como consta en la solicitud para su autorización presentada en el Ayuntamiento por el presidente accidental de las JJ.SS., Juan Lozano y su secretario general, Francisco Segovia. 

Varias jornadas depués, el Centro Instructivo Obrero organizaba un mitin para el 1º de Mayo, a las cuatro de la tarde, en la casa del Pueblo con la intervención de Ramón Muñoz, Enrique Esbrí, (de la Agrupación Socialista de Jaén y director de la Escuela Normal de Magisterio); Francisco Vilches Venceslá, afiliado de la Sociedad Obrera de Trabajadores de la tierra “La Moral de Obrero” de la UGT de Cazalilla; José Requero Cardeñas, de la Agrupación Socialista de Andújar y afiliado de la Sociedad Obrera de Agricultores “El Porvenir” de la UGT; Antonio García “Maqueano”, concejal socialista desde 1920 y en varias ocasiones Teniente de Alcalde; Frasquito Gil, de la Federación de la Tierra de UGT local, y, finalmente, el presidente del Centro Instructivo Obrero, Bartolomé Pastor “Bartolillo el Presidente”. 

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​Todos ellos disertaron sobre la significación del 1º de Mayo y a cerca de los problemas políticos y sociales más urgentes de la clase jornalera. Sin embargo la manifestación prevista que iba a tener lugar durante la mañana por las calles de la población, partiendo desde la Casa del Pueblo, no obtendría la autorización del alcalde  José Vencelá Mingorance, viéndose obligada la organización obrera a reemplazarla por una gira campestre que partiendo de la calle Calvario discurrió hacia el sitio denominado Llano del Chaparralejo. En este lugar cercano a la ribera del Guadalquivir y a la Huerta del Río, tuvieron lugar, entre otras, las sentidas y aplaudidas intervenciones de Ramón Muñoz Casares y del representante de las Juventudes Socialistas, Juan José Jurado Castro. Las sobrinas del histórico socialista Gaspar Casas, Juana y Francisca Casas Pastor aún mantenían en su recuerdo el seguimiento multitudinario de aquella jornada y la brillante y efectiva oratoria demostrada por el maestro granadino (2). 

 Después de su estancia en la Granjuela, volvería a Villardompardo, en plena Guerra Civil, donde se implicaba, nuevamente, en las actividades de la Agrupación Socialista local. Pero dado sus compromisos con la organización provincial, en septiembre del 36, le pedía a la dirección del PSOE, ejercer en alguna de las escuelas nacionales de la capital, o ser nombrado Inspector Provincial de Primera Enseñanza, según los datos obrantes en la Fundación Pablo Iglesias. No obstante concurría como delegado por la Agrupación Socialista de Villardompardo, al II Congreso de la Federación Socialista Provincial, celebrado el 30 y 31 de octubre de 1937. Allí fue elegido Presidente de la Mesa del Congreso y formó parte de la ponencia “Nuestro partido y la guerra”, lo cual revela  su alto nivel de capacitación y el consenso que generaba dentro de las bases del partido. 

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Cozvíjar (Granada), localidad donde nació el maestro Ramón Muñoz Casares.

Foto: Patronato Provincial de Turismo de Granada.

Los fondos existentes en el Archivo General de la Memoria Histórica  confirman que en junio de 1937, en plena contienda, se le encomienda la gestión administrativa del Regimiento de Milicias de Jaén, primera fuerza de choque voluntaria frente el avance de los sublevados tras los primeros días del golpe militar de julio, pues lo vemos acudir a Valencia, donde se había desplazado la sede del gobierno central, para gestionar ante el Subsecretario de Defensa Nacional, Antonio Fernández Bolaños, los haberes de los milicianos del citado Regimiento.  En septiembre era recomendado por su amigo y compañero de partido José López Quero (3), diputado por Jaén y  Comisario Delegado de Guerra de la 20 División,  para el cargo de  Delegado Político de la Sección de Carabineros con sede en Andújar. En dicha misiva dirigida por López Quero a Juan Ortiz, secretario particular del subsecretario de Hacienda, Jerónimo Bugeda Muñoz (4) le comunicaba que “precisando al camarada Ramón Muñoz Casares en los trabajos que viene realizando en el Comisariado de Guerra, hemos acordado el nombramiento de Casares como Delegado Político para la sección de Carabineros que hay aquí en Andújar. Es preciso que ahora  que yo tengo que ir a Valencia  procures pueda traerme el asunto arreglado; pues la cuestión Regimiento de Milicias de Jaén se termina, y como a este buen compañero se le tiene olvidado, es fácil que solicitara alguna escuela, con lo cual perderíamos su valiosa ayuda. Firmado José López Quero, a 26 de septiembre de 1937”. 
    Un año después, septiembre de 1938, Ramón Muñoz  ocupaba el cargo de Secretario adjunto de guerra en la Comisión Ejecutiva Provincial del PSOE.  Al finalizar la guerra era detenido y condenado a 20 años de reclusión en Consejo de Guerra, celebrado el 24 de febrero de 1940. El 3 de septiembre de 1942 sería trasladado a la prisión de Hellín (Albacete) de la que salió en libertad condicional el 16 de mayo de 1943. A partir de ahí se nos pierde su huella, aunque previsiblemente  rehizo su vida por la región levantina pues hacia 1969 solicitaba volver desde la provincia de Valencia al colegio de primaria de Pinos Puente (Granada) en el concurso de traslados de aquel año. 
  Falleció el 23 de diciembre de 1978 en su domilicio de la calle Pintor López Mezquita de la ciudad de los carmenes, a la edad de 75 años.

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Notas:

(1) Francisco Melero Rodríguez y Francisco Amor Moya, eran jornaleros del campo naturales de Villardompardo. Tras la huelga del 6 Octubre de 1934 fueron condenados por el delito de conspiración en toda España. Sus nombres aparecen relacionados en el Sumario 11/1934 instruido por el Juzgado de Instrucción Especial de Madrid. En relación a Francisco Amor, finalizada la Guerra Civil fue detenido siendo condenado a 30 años de reclusión en Consejo de Guerra. Ingresó en la prisión de Jaén el 1 de junio de 1940 y el 22 de enero de 1944 en la Colonia Penitenciaria de Los Merinales en Dos Hermanas (Sevilla) trabajando en las obras del llamado “Canal de los Presos”. Salió en libertad condicional el 27 de marzo de 1946, estableciendo su residencia en Dos Hermanas, donde perteneció a la organización clandestina. Restablecida la democracia, formó parte de la Agrupación Socialista de dicha localidad. Falleció en 1986. Fuente: Fundación Pablo Iglesias.
(2) Entrevista realizada en Santiponce (Sevilla), el día 23 de noviembre de 2008.
(3) Véase biografía en Fundación Pablo Iglesias sección: Biografías.
(4) Véase aspectos biográficos en Archivo de la Fundación Pablo Iglesias.

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Fuentes y Bibliografía:
-Centro Documental de la Memoria Histórica de Salamanca. Documentos relacionados con Ramón Muñoz Casares.
-Archivo de la Universidad de Granada
-Archivo Histórico Nacional: Signatura FC-Audiencia_T_Madrid_Criminal. 23, Exp.3. 
-Fundación Pablo Iglesias: “Diccionario Biográfico del Socialismo Español”: datos biográficos de Ramón Muñoz Casares elaborados a partir de los datos obrantes en el Archivo histórico PSOE, Archivo General de Alcalá de Henares y periódico Democracia de Jaén, año 1937.
-Archivo del Ayuntamiento de Marmolejo
-Registro Civil de Granada, tomo 24, página 87. Hoja de defunción de Ramón Muñoz Casares.
-Registro Civil de Montoro. Mi agradecimiento a D. Lorenzo Ruiz Leiva.
-Anuario Regional de la región Andaluza y Norte de España y de África”, 2º edición. Año 1932. Edita Anuarios Regionales de España. Madrid.
-Centro Documental de la Memoria Histórica: Delegación Nacional de Servicios Documentales de la Presidencia del Gobierno.
-”El Magisterio Español”, de 11 de julio de 1933, y 13 de septiembre de 1934.
-“El defensor de Córdoba”, número 11631 de 13/8/1934.
-”El Magisterio cordobés”, n.º 271, de 30 de mayo de 1935.
-”Escuela Española”, año XXIX, n.º 1713. Madrid, 14 de marzo de 1969.

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